Friday, January 1, 2010

Depresión y suicidio

Depresión y suicidio

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687

Resumen:
Dieciocho años de edad Catalina tenía todo: la familia más de apoyo, un novio amante, impresionante conjunto de amigos y una vida cómoda. Pero todas estas cosas tomaron un asiento de atrás cuando se le diagnosticó depresión. Desde el charlatán burbujeante que estaba, ella se transformó en una muchacha melancólica, que no tenía nada en mente, pero para matarse. "No queda nada para vivir. Soy inútil y sin esperanza." Esa declaración corrió en su cabeza una y otra vez. Quería saltar ...


Palabras clave:
la depresión, la ansiedad, ayuda, triste


Cuerpo del artículo:
Dieciocho años de edad Catalina tenía todo: la familia más de apoyo, un novio amante, impresionante conjunto de amigos y una vida cómoda. Pero todas estas cosas tomaron un asiento de atrás cuando se le diagnosticó depresión. Desde el charlatán burbujeante que estaba, ella se transformó en una muchacha melancólica, que no tenía nada en mente, pero para matarse. "No queda nada para vivir. Soy inútil y sin esperanza." Esa declaración corrió en su cabeza una y otra vez. Quería saltar del puente o el formaldehído beber a su antojo.

Ella era suicida.

Tomó un montón de visitas al médico y el apoyo de su familia y amigos antes de Catherine se recuperó la normalidad. Ahora, se han ido de la melancolía y los pensamientos suicidas. Ella acaba de terminar la universidad y está a punto de comenzar su trabajo de ensueño.

El suicidio se define como el acto de matar a sí mismo intencionalmente. Se deriva de la depresión grave, una enfermedad que interfiere en el aspecto mental, físico y emocional de una persona.

La mayoría de las personas deprimidas en realidad no se suicidan. Pero la depresión se activa un mayor riesgo de suicidio. Nuevos datos ha informado de que dos por ciento de las personas deprimidas que han recibido tratamiento para la depresión en un escenario de pacientes externos podría morir por suicidio. Un cuatro por ciento de aquellos que fueron tratados en un ambiente de hospitalización también se puede morir por el mismo método. Los que tienen intentos suicidas antes de que sean más probabilidad de morir por suicidio más adelante. Otra investigación muestra que el 7 por ciento de los hombres con antecedentes de depresión finalmente se matan mientras que sólo el 1 por ciento de las mujeres con antecedentes de depresión hará.

Aquellos que han tenido los trastornos del estado de ánimo de suicidarse. Los más jóvenes de depresión clínica a menudo recurren al abuso de sustancias para suicidarse.

El método más común de suicidio es por el uso de armas de fuego, ya que constituye el 60 por ciento de los suicidios. De un estudio del Instituto Nacional de Salud Mental, aproximadamente el 80 por ciento de los varones blancos suicidarse disparándose. Esto empuja a la determinación de que un arma de fuego deben ser retirados de la casa si un miembro de la familia descubrió que el riesgo de suicidio.

El método más común para los hombres está colgado en la sobredosis de drogas o auto-envenenamiento es el segundo método de suicidio más común para las mujeres.

Aparte de la depresión, hay otros factores de riesgo de suicidio:

1. Impulsividad. Hay gente que hace cosas por capricho. Si uno tiene un arma en la mano, podría dispararse a sí mismo de un impulso.

2. Eventos de vida traumáticos. Una muerte de un ser querido, RUT financieros o la adversidad otro podría obligar a una persona a matar a sí mismo.

3. Historia del suicidio en la familia. No hay tal cosa como "contagio suicida" en el que una persona está expuesta a los suicidios y los intentos de suicidio a menudo. Esto puede convertirse en un factor de riesgo de la muerte onself.

4. La violencia familiar si uno es abusado física o sexualmente, él o ella podría a su vez al suicidio para poner fin a la prueba.

5. El intento de suicidio antes de que Él lo ha hecho antes, ¿por qué no hacerlo de nuevo?

6. Abuso de alcohol y de drogas de un alcohólico o adicto a las drogas llegará a un punto en que no tendrá ningún reparo en matar a sí mismo.

La depresión es un problema que tiene que ser arrancado para mantener a raya a los pensamientos suicidas. Si una persona se suicida, es imprescindible que reciba un tratamiento profesional. Por lo general, los que están pensando en suicidarse no saben que necesitan ayuda.

Prevención del suicidio no es tarea fácil, tampoco. Es en este punto de vista de que un amplio y extenso programa de prevención del suicidio debe ser establecido. Estos programas deben concentrarse en el tratamiento de la depresión y abuso de drogas. Antes de ser lanzado al público, deben ser evaluados y probados científicamente primero de la eficacia y seguridad. También deben ser amplios y complejos como para que los efectos durarán mucho tiempo y, finalmente, desterrar toda idea de suicidio. También deben llevarse a cabo de acuerdo con la edad, la cultura y el sexo de los pacientes suicidas.

La depresión y el suicidio van de la mano, pero si uno trabaja duro para combatir la depresión de los pensamientos de suicidio se va a acabar.